Mujer, tecnología y videojuegos
Hasta hace pocos años, el mundo de las tecnologías, de los dispositivos como la realidad virtual, sus lentes y accesorios, la realidad aumentada, eran más fácilmente relacionadas al mundo masculino. De igual forma, el trabajo en el desarrollo tecnológico como la robótica y los videojuegos, se veían como campos distantes a nosotras a los que se podía acceder luego de superar barreras o demostrar habilidades afines. Sin embargo, y gracias a distintos programas que fomentan la inclusión, el cambio de mirada generacional y otros factores sociales, las niñas y mujeres han encontrado su lugar en el mundo de los videojuegos y las tecnologías.
Era muy complicado encontrar personajes femeninos protagonistas en videojuegos o que tuvieran un papel importante en el desarrollo de las historias, lo que dejaba a las mujeres sin ningún referente visual o narrativo. Hoy podemos encontrar personajes como Aloy en Horizon (Zero Dawn y Forbidden West), quien es la protagonista en un mundo post apocalíptico, que debe entender y resolver los enigmas de un mundo tribal, en donde el ser humano debe vivir y sobrevivir al encuentro diario con máquinas robóticas. La complejidad de la narrativa en este videojuego, catapultan a Aloy como una de las máximas referentes femeninas actuales llegando incluso, a ser portada de la revista Vogue durante el lanzamiento de la parte dos del videojuego.
La mirada de la mujer en la industria del videojuego, como creadora, pero también como técnica en el desarrollo, ha quedado marcada en la constante lucha de grupos como GetWigi en Estados Unidos, que buscan eliminar la brecha salarial, el abuso laboral y acoso sexual en todas las empresas tecnológicas en las que las mujeres siguen siendo minoría.
El velo ha caído y poco a poco queda claro que las mujeres tenemos mucho que decir y mucho que crear en la industria de los videojuegos y en el mundo tecnológico. Podemos crear entornos virtuales, programar un dispositivo con una raspberry, renderizar una cinemática en tiempo real o luchar con enormes máquinas para salvar al mundo.